Jesús cuando escoge a los apóstoles los escoge para que sean instrumentos de Dios en la vida de los hijos e hijas de Dios.
Seguir a Cristo es un llamado que implica dejar muchas cosas, hacer muchos sacrificios, seguir a Cristo es imitar la propia vida de Cristo.
Cristo llamo a los 12 apóstoles, llamo a San Pablo, llamo a muchos que dejaron todo y cambiaron sus vidas solo para servir a la voluntad de Dios.
Si sientes en tu corazón que Dios te llama para algo profundo en tu vida. O si sabes de alguien que siente un llamado, habla son el sacerdote para que el proceso de discernimiento vocacional pueda empezar. Jesús ya hacía proceso vocacional en su tiempo.
“Jesús le contestó:
—Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres. Así tendrás riqueza en el cielo. Luego ven y sígueme.
Cuando el joven oyó esto, se fue triste, porque era muy rico.
Pedro le dijo entonces:
—Nosotros hemos dejado todo lo que teníamos y te hemos seguido. ¿Qué vamos a recibir?
Jesús les respondió:
—Les aseguro que cuando llegue el tiempo en que todo sea renovado, cuando el Hijo del hombre se siente en su trono glorioso, ustedes que me han seguido se sentarán también en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel. Y todos los que por causa mía hayan dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o hijos, o terrenos, recibirán cien veces más, y también recibirán la vida eterna. Pero muchos que ahora son los primeros, serán los últimos; y muchos que ahora son los últimos, serán los primeros.” (Mateo 19, 21-22, 27-30)
Si sientes el llamado de Dios o sabes de alguien, llama al : 410-964-1425 x312 o email: [email protected]